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Investigadores italianos realizaron experimentos para evaluar la calidad del trigo cultivado bajo un sistema de cultivo fotovoltaico de alta intensidad. Descubrieron que tenía un mayor valor nutricional para el ganado.
El estudio fue realizado por el Instituto CNR de Bioeconomía de la Universidad de Florencia y especialistas italianos en agrofotovoltaica en 11,4 hectáreas de trigo en Borgo Virgilio, en la provincia de Mantua. El sistema incluía 7.680 paneles Bisol y 768 seguidores a una altura de 4,5 metros, para una cobertura fotovoltaica total de 1,3 hectáreas.
El equipo utilizó tres áreas fotovoltaicas de 12 mx 12 m con un índice de cobertura del suelo (GCR) del 13% y tres áreas de 144 m2 con un GCR del 41%. También se utilizaron tres secciones de referencia con características similares pero sin paneles ni estructuras de sombra.
"La prueba de dos años mostró que la reducción en el rendimiento de grano se limitó a la etapa de fenología de maduración de cera del seguidor estándar (GCR = 13 por ciento), mientras que los paneles con mayor sombreado mostraron una reducción del 29,6 por ciento (GCR = 41 por ciento)", afirmó Lucrezia Ghidesi. "La reducción de la irradiancia cambió significativamente la longitud de las plantas de trigo, afectando la calidad de la biomasa forrajera."
El equipo de investigación consideró parámetros como materia seca, cenizas, contenido de proteína cruda, proteína detergente neutra insoluble, proteína detergente ácida insoluble, proteína soluble, fibra detergente neutra, fibra detergente ácida y lignina detergente ácida.
El estudio demostró que la sombra afectaba las fracciones proteicas y fibrosas de la biomasa del grano y la digestibilidad del alimento para rumiantes.
Los científicos explicaron: "Después de 24 horas de incubación in situ en el rumen, la fibra detergente neutra digerible aumentó al aumentar la sombra". El contenido de proteína cruda y soluble, proteína insoluble en detergente ácido, fibra detergente ácida y fibra detergente neutra fue mayor en la zona sombreada que en la zona de control. La biomasa de la zona sombreada tuvo una mejor relación calcio-fósforo para la alimentación de rumiantes.
El equipo realizó la prueba entre 2022 y 2023. Los datos serán validados aún más mediante pruebas en 2024. La compañía explicó que el rendimiento promedio podría cambiar en los próximos meses.
Los científicos concluyeron: "Estos resultados pueden ayudar a mejorar el rendimiento de la biomasa y proporcionar información valiosa sobre el trigo duro en sistemas agrícolas fotovoltaicos".
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