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En el cambiante panorama energético global actual, el almacenamiento de energía está pasando de ser una tecnología considerada opcional a una base indispensable para los sistemas eléctricos modernos. ACE presenta una nueva generación de módulos de batería diseñados para sistemas de almacenamiento de energía de alto voltaje de 1500 V. Con alta densidad energética, seguridad absoluta, gestión térmica avanzada y operación y mantenimiento optimizados, estos módulos están diseñados para satisfacer los exigentes requisitos de aplicaciones industriales y comerciales, generación de energía, servicios a escala de red y casos de uso detrás del medidor.
Cada módulo está construido alrededor de una celda de fosfato de hierro y litio (LFP) de alta capacidad con una capacidad de 314 Ah, optimizada para el almacenamiento de energía de larga duración. Con una densidad de energía líder en la industria y un ciclo de vida excepcional, reduce significativamente el costo nivelado de almacenamiento (LCOS) durante la vida útil del sistema.
Partiendo de esta base, el sistema adopta una innovadora arquitectura modular de gran tamaño que facilita la integración, reduce los componentes estructurales innecesarios y maximiza la eficiencia volumétrica. El módulo emplea un marco modular ligero con abrazaderas de banda para reducir aún más el peso, manteniendo al mismo tiempo la robustez mecánica. Esto facilita el transporte, la instalación y la futura expansión, lo que lo hace ideal para aplicaciones donde el espacio y el peso son factores críticos.
La seguridad sigue siendo la máxima prioridad en cualquier sistema de almacenamiento de energía. El módulo ha superado con éxito una rigurosa prueba de resistencia dieléctrica de 4380 V CC, demostrando un rendimiento de aislamiento superior sin observarse roturas ni fallos eléctricos. También ha superado la prueba de propagación de fugas térmicas UL 9540A, suprimiendo eficazmente la propagación térmica en condiciones extremas y garantizando la fiabilidad del producto.
Además, múltiples mecanismos de desconexión a nivel de hardware, como fusibles y desconectores de servicio manuales (MSD), se integran a la perfección con el Sistema de Gestión de Baterías (BMS). Esto crea un proceso de seguridad de circuito cerrado, desde la detección de fallos en milisegundos hasta la desconexión automática rápida.
El módulo incorpora tecnología avanzada de refrigeración líquida, combinada con algoritmos inteligentes de control térmico, para gestionar con precisión el calentamiento y la refrigeración en cada unidad. La diferencia de temperatura interna se controla con una precisión de 3 °C, lo que mejora considerablemente la consistencia de la celda, la capacidad útil y la vida útil general.
En comparación con las soluciones tradicionales de refrigeración por aire, la refrigeración líquida funciona de forma más silenciosa, consume menos energía y se ve menos afectada por el polvo o las condiciones ambientales, lo que garantiza la adaptabilidad a una amplia gama de climas y aplicaciones.
La eficiencia operativa se ve reforzada por una estructura interna altamente modular que minimiza el número de componentes. El MSD y la BMU permiten la sustitución inmediata sin necesidad de herramientas especiales ni desmontajes complejos, lo que reduce significativamente el tiempo de inactividad del sistema y los costes de mantenimiento. Las interfaces estandarizadas y un diseño intuitivo hacen que el mantenimiento en campo sea más rápido, seguro y fiable.
De cara al futuro, los módulos de almacenamiento de energía con refrigeración líquida de ACE Battery seguirán impulsando la transformación global hacia la energía verde a través de una alta integración, una seguridad excepcional, una confiabilidad excepcional y una flexibilidad robusta, lo que hará que cada kilovatio-hora sea más eficiente, más seguro y más sostenible.
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